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En las consultas dentales de hoy en día encontramos una creciente demanda por parte de los pacientes de mejorar la estética de su sonrisa. Cada vez es mayor el número de personas que se preocupan por tener una sonrisa bonita y armónica.
Cuando un paciente acude a la consulta con esta preocupación, lo primero que debemos hacer es analizar la situación de la que partimos y a partir de ahí valorar cada caso diseñando una nueva sonrisa que resulte bella y acorde a su cara, para así poder alcanzar las expectativas del paciente.
«En muchos casos podemos conseguir una sonrisa armónica y bonita con la confección de carillas cerámicas o de composite. Las carillas estéticas nos permitirán modificar el tamaño, forma o/y color de uno o varios dientes.»
¿Qué es una carilla?
Las carillas dentales son reconstrucciones estéticas que se realizan en la cara externa de los dientes anteriores con el fin de corregir su tamaño, forma y/o color.
¿Carillas estéticas cerámicas o de composite?
El tipo de material a elegir para las carillas estéticas, lo decidiremos en función del caso a resolver:
Carillas de composite
Las carillas de composite son confeccionadas directamente en clínica sobre la superficie del diente/s a modificar, estratificando composite que mimetice al esmalte y dentina de los dientes adyacentes. Es un tratamiento poco invasivo y por ello suele ser el tratamiento de elección en niños que todavía les queda un periodo de crecimiento y maduración. En adultos también se pueden realizar este tipo de tratamientos, pero nos encontramos con el inconveniente de que es un material que se degrada con el paso del tiempo (decolorándose y desgastándose) sobre todo en pacientes con determinados hábitos como el café, té, tabaco… y se verán obligados a renovarlas en menor tiempo que si hubiesen sido cerámicas.
Carillas cerámicas
Las carillas estéticas cerámicas o de porcelana son confeccionadas en el laboratorio tras una preparación en clínica de los dientes a tratar. El tipo de cerámica con el que se elaboran estas carillas será feldespática (cuando el color base del diente es bueno y no necesitamos mucha resistencia) o de disilicato de litio (cuando necesitamos un material más resistente). Consisten en finas láminas cerámicas (podríamos compararlas con una “uña de porcelana” ) que se adhieren al esmalte del diente a modificar.
«En este tipo de carillas es importantísimo trabajar con laboratorios que compartan una filosofía de trabajo que persiga la naturalidad en la estética, altamente cualificados y con una formación continuada.»
La ventaja de las carillas estéticas de cerámica frente a las de composite es que no se alteran en el tiempo, perdurando su color y, además, permiten una reflexión de la luz muy similar a la del diente natural, con lo que se consigue un gran mimetismo con los dientes adyacentes en color, textura …
Cuando hacemos carillas cerámicas transcurrirá un periodo desde que se prepara el diente o los dientes a modificar, hasta que se colocan las carillas estéticas confeccionadas en el laboratorio. Durante este proceso colocamos unas carillas provisionales que realizaremos previamente a la preparación de los dientes a partir del estudio previo del caso con fotos, modelos… De este modo, el paciente conservará una estética aceptable en todo momento.
¿Cuándo recomendamos de composite o de cerámica?
Las carillas de composites están sobretodo indicadas en niños que presentan alguna malformación dentaria (como es el ejemplo de dientes conoides o microdónticos), hasta que hayan completado su etapa de crecimiento y puedan optar a un tratamiento con cerámicas. Este tratamiento con composites también lo podemos proponer en adultos, aunque sabiendo que este es un material que se altera con el tiempo.
En un paciente adulto indicamos habitualmente un tratamiento con carillas cerámicas para modificar la forma, tamaño y/o color de un diente o más.
Pros y contras
El composite es un material que se puede alterar su color en el tiempo (sobre todo en pacientes muy fumadores, muy cafeteros …), con lo cual podríamos decir que es una de las desventajas del composite frente a la cerámica que perdura en forma y color con el tiempo.
Una ventaja de las carillas estéticas de composite frente a la cerámica es que no requiere tocar el diente ya que se trataría de ir estratificando composite sobre el propio diente por adhesión.
¿En los casos con carillas cerámicas siempre hay que tallar el diente?
Hay casos en los que no habría que tocar apenas diente, por ejemplo en dientes conoides o microdónticos (es decir, dientes que genéticamente son más pequeños de lo normal) y estén bien posicionados). Sin embargo, en la mayoría de los casos, tendremos que limar un espesor de esmalte de entre 0,3 a 0,8mm. Una cantidad muy pequeña de cualquier forma. El símil quizás más fácil de entender sería una uña de porcelana, ya que realmente se trata de una lámina de cerámica muy fina que se adhesiona al esmalte para mejorar el aspecto del diente.